Corriendo libre

Obligaciones, trabajos, conocimientos; compromisos, pensamientos, palabras; ideales, esperanzas, ilusiones…Todo ataduras que nos impiden vivir cada instante desde la más añorada inocencia.

Ella se quedó colgada de una percha en el zaguán de los recuerdos, y desde allí junto al amor de nuestros padres se nos muestra sonriente, para que la recordemos y la reconozcamos en aquellos que han de pisar nuestras huellas.
La bonita visión nos liga más si cabe, esta vez a un intento casi vano de mantener el admirado candor, durante el máximo de tiempo posible.